Cercanía con el cliente desde 1913
Strianese Hnos. inicio sus actividades en la zona de Turdera (Lomas de Zamora) en el año 1913. Las hermanas Inés y Eugenia Turdera estaban, por entonces, terminando de transformar su chacra en un pueblo. El fundador, don Antonio Strianese, italiano de origen, resolvió desplazarse de su radicación en Barracas y se fue a probar suerte a este nuevo y pujante desarrollo vecinal. Comenzó a viajar diariamente utilizando, obviamente, el tren del F.C. Sud hasta Temperley, y luego abordando el “tranvía a caballos” que corría por la calle 9 de Julio.
El primer desempeño comercial fue la venta de carbón, leña, alambres y postes, requeridos por los nuevos pobladores; rápidamente acoplo el rubro de materiales. Alquiló una fracción de tierra (que luego adquirió y que es la sede actual), erigió un gran tinglado y contrato a sus primeros ayudantes, casi todos extranjeros. Cuarenta años después y ya con su establecimiento expandido, don Antonio manifestaría, con lagrimas en los ojos, que a todos esos ayudantes de la primera hora les debía el éxito de su emprendimiento.
Al ver crecer su criatura, don Antonio Strianese incluyó en el equipo a su hermano Alberto y, con el dinamismo de ambos, se constituyó una empresa que proveyó materiales y carpintería de madera a numerosas construcciones, no sólo en la zona sino también en la Capital Federal. Eran tiempos en los que los empleados de Strianese, trabajando ocho horas, en pocos años pudieron construir su propia casita: “Había que trabajar duro, pero no había inflación, ni demagogos”, contarían más tarde los fundadores.
Tras derivar la actividad a la importación de maderas y construcción de techos de tejas, la empresa se convirtió finalmente en una concesionaria de automóviles Chrysler. Antonio y Alberto Strianese continuaron al frente del establecimiento hasta 1960. Por entonces, los hijos de Alberto se hicieron cargo de la gestión y comenzó una nueva y moderna etapa.
Luego de 100 años de existencia, y con el gerenciamiento de la 3ª y 4° generación familiar, Strianese exhibe hoy sus especificas y funcionales instalaciones para la venta y servicio de vehículos Volkswagen, utilizando como base de operaciones el mismo predio que, cuando aun no había dado comienzo la 1ª Guerra Mundial, adquirieran sus antecesores para vender ladrillos.